Bye bye Piqué

Harto de mezquindades y miserias dimitió Josep Piqué. No es que me cayera especialmente bien, porque a un catalán decente no le puede caer bien alguien que pertenece al partido de la catalanofobia más furibunda que se recuerda desde la instauración de la dedocracia y sin llegar a la entrada de los franquistas en Barcelona. Sin embargo este tipo, como Gallardón, parece persona moderada abierta a un cierto diálogo y una derecha moderna. Y eso en el peporro de hoy día, que aún no ha asimiliado estar en la oposición por fulleros, cae como un tiro. Pero mira, mientras haya Zaplanas, Acebes y Rajoys, yo contento porque el PP seguirá en la oposición... siempre y cuando los socialistos no se pongan a emular los últimos tiempos del felipismo. La dimisión de Piqué y la marcha de Jaume Matas demuestran lo que salta a la vista, que el PP vuelve, cada día más, a la senda de AP. Si siguen involucionando pronto volverán a llevar bigote mosca, gafas oscuras, uniforme militar, pistola al cinto y cazarán rojos en sus ratos libres.

Jorls.