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La esperanza es lo último que se pierde

Monarquía. Ese anacronismo

Monarquía. Ese anacronismo

El rey llegó pelao y está forrado.

Sobre los vicios y demás costumbres de la familia real, principalmente de Campechano I, nada se escribe.

Se denosta la II república (que alcanzó niveles de derechos y libertades que aún hoy no tenemos) y se ensalza el peor de los anacronismos. El hecho de que alguien sea jefe de estado por su sangre, por derecho de nacimiento. Por ser rey. Me gustaría saber cuántos soberanos han ganado su puesto con el sudor de su frente y no con el sudor (y la sangre) de los demás. Me gustaría saber en qué demonios trabaja toda esta familia, que no para de crecer y chupar del bote. Y cuando digo trabajar me refiero a currar de verdad, no a presidir mesas solidarias, empresas de amiguetes y otros chanchullos. Sobretodo porque viendo como está el tema de la vivienda y las hipotecas, se montan unos pisazos que son un insulto a los que andamos siempre pendientes del puto euribor. Me gustaría saber porqué tengo y tendré un rey que no he votado. Me gustaría...

Diomio, diomio, diomio...

Iba a hacer un comentario largo, pero es que me sube la bilirrubina.

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